DailyCosas 2.0

Quizás sea el n+1 que escriba sobre este tema, pero es que tiene que quedar bien claro, que luego nos meten doblado el canon y encima algunos pensarán que nos lo merecemos. Cuando leí este artículo La blogosfera insiste: “las descargas no son piratería” [ELPAÍS.com], sentí que no podía sino unirme a esta denuncia. Este es mi granito de arena.

Me hace mucha gracia escuchar constantemente usos inapropiados de la palabra piratería. Escuché hace poco una noticia en la radio que hablaba de piratería por internet. Y quitando los bucaneros con parche en el ojo, no reconozco mas piratería que aquella que engaña y saca beneficio. Simplificando: un vendedor (en un rastrillo o en eBay) de colonias falsificadas = pirata, un vendedor de películas copiadas = pirata, alguien que copia el diseño de una ropa y la vende como original = pirata, alguien que no tiene licencia para un negocio y lo realiza (cobrando) = pirata… una persona que comparte archivos NO es pirata.

Hoy hablaremos (y distinguiremos) entre Piratería, Falsificaciones y P2P.

Una definición de piratería:
[Via: Kriptópolis]

Gente que roba la propiedad intelectual de otros para su propio beneficio financiero personal, mientras defrauda a unos consumidores que creen estar comprando productos legítimos.

A mi entender, cuando salieron las monedas de euro se comentieron muchos desmanes en su diseño.

El principal problema es que una cara fuese común y la otra cambiase en cada país. A efectos de coleccionismo ha sido muy divertido ver a la gente cambiar las monedas como si fueran cromos, pero para mi no tiene ni pizca de gracia que si cae en tu mano por el lado cambiado dudes de que es lo que tienes en la mano. Aunque lo mas divertido es la feliz idea de cambiar las monedas (después de sólo 5 años de uso) ahora que se incorporan nuevos países. Al final nos encontraremos con un carajal como el de estos Euros de coleccion sin valor de curso legal.