El pasado sábado murio un hombre con un sueño: fabricar el coche del futuro en el presente… La verdad es que no puedo decir mucho de él, solo que Robert Zemeckis vio que ese coche era la plataforma ideal para fabricar una máquina del tiempo en una de las sagas de películas que mas me impactó de pequeño Regreso al Futuro (Back to the Future, 1985). Ese hombre fue John De Lorean, murió el sábado de complicaciones de un derrame cerebral reciente, y su sueño el coche DeLorean. Entre las peculariadades de este coche destaca que no tiene pintura, su carrocería es directamente de acero inoxidable y que su puertas (solo dos) se abren como una mariposa, hacia arriba.
La corta historia de este coche tan futurista se resume en que tuvo unas ventas pésimas (solo se fabricaron 9.000 unidades), y la empresa DeLorean fue a pique en 1984. Como reseña acerca de la película, decir que el chiste estaba en que los hechos ocurrian en 1985, cuando la empresa ya había quebrado.
Comprobemos el condensador de fluzo y viajemos….